Estamos aún en plena temporada nupcial. El verano no solo nos trae calor sino también festivales, viajes a la playa y ¡BODAS! Y ya sabemos que en una boda, todas las miradas, o casi todas, se centran primero en la novia. Pues, bien, con este post queremos hacer un repaso de lo que hemos visto en este año en moda nupcial y echar un vistazo a lo que viene pisando fuerte cuando hablamos del vestido de la novia.
Hemos querido centrarnos en los modelos que podemos encontrar en las tiendas de dos grandes firmas españolas, más que requeteconocidas. Pronovias y Rosa Clará. Viendo sus colecciones, tenemos un apunte de las tendencias que nos podemos encontrar también en otras firmas. Así que, vamos a ello.
Pasado y presente
Comenzamos haciendo mención a dos cortes que no pasan de moda y que, por su versatilidad, no lo harán. Los vestidos de estilo de sirena y los de corte en A. El estilo sirena permite destacar la feminidad de la figura de la mujer, nos aporta sensualidad y definición en el corte del cuerpo del vestido. Las faldas con corte en A siguen manteniendo ese toque clásico y el juego y la diversidad los conseguimos con los materiales y acabados.
No faltan los escotes corazón, especialmente para los vestidos sin tirantes, ni las espaldas descubiertas. En cuanto a escotes y mangas, el efecto tattoo parece que llegó para quedarse. A nosotras, personalmente, nos encanta.
Y, por supuesto, la presencia de los adornos florales; ya sea en encajes, bordados o pedrería, es un elemento a tener en cuenta temporada tras temporada.
El futuro
Ojeando a fondo, notamos que los vestidos de novia del 2017 y los que vendrán en 2018 no apuestan por largas e interminables colas. Se acortan para darle a la novia más movilidad. En general, vemos cada vez más vestidos en los que el protagonista es el propio corte y patrón del vestido. Minimalistas y sencillos en cuanto a adornos se refiere. El crepe ha llegado para quedarse. Al menos un años más.
Las espaldas de infarto nos van a seguir alegrando la vista. Bien sea continuando con el efecto tattoo lace o con espaldas joya. Esta última opción la vemos muchas, muchas veces de la mano de vestidos con un frontal más sencillo.
Para aquellas novias que no acaban de decidirse entre un vestido más formal y voluminoso o uno que marque más su silueta, veremos sobrefaldas y vestidos desmontables. Dos looks para un mismo día, un único vestido y la satisfacción de no renunciar a nada.
¡También tendremos capas! No de superhéroe; sino fluidas, sensuales, vaporosas. Aportando elegancia y vanguardismo al look nupcial. No hay por qué conformarse con un tocado si el velo tradicional no es nuestra opción predilecta.
Y para las más atrevidas, veremos aberturas laterales que dejan insinuar (o no) unas piernas de infarto. Ese toque femme fatale...
Por último, queríamos destacar dos de las ideas más rompedoras. Sabemos que a muchas no les gustará de primeras, pero esperamos que sea una tendencia que veamos a lo largo de más temporadas. Los vestidos de dos piezas y el uso de crop tops, ya sea en el propio conjunto de dos piezas o como complemento para el vestido de novia.
Y vosotros, ¿con cuál os quedáis?
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